Sintra es un precioso pueblecito situado en la Sierra de Sintra con callejas estrechas y rincones pintorescos. En verdad os digo que parece el decorado de una pelicula de espadachines "en vivo y en directo".
Palacios, Castillos, casas nobles...en un día es imposible ver todo con mediana profundidad, así que seleccionamos.
El Palacio Real está situado en el medio de Sintra y a su alrededor emergen multitud de Villas de personajes cercanos a la Realeza.
Lugar de vacaciones de los
Reyes de Portugal en el s.XIV, junto con el Palacio de Pena al que fuimos más tarde, es un despliegue de poder económico y social para la época.
Reyes de Portugal en el s.XIV, junto con el Palacio de Pena al que fuimos más tarde, es un despliegue de poder económico y social para la época.
El Palacio Real está recubierto de azulejos en su interior, preciosos, cultura árabe por excelencia, decoran las estancias dándoles una suntuosidad impresionante.
Muchos Bargueños en las alcobas, guardaban en su interior secretos, joyas...y cualquier cosa importante que requiriera escondite.
Todos ellos decorados ricamente con nácar, marfil, oro, taraceas...
Todos ellos decorados ricamente con nácar, marfil, oro, taraceas...
La Sala de los Escudos, en ella están los escudos de los nobles que apoyaron al
Rey en sus gestas
Rey en sus gestas
La Sala de las Sirenas
La cocina de Palacio tenía capacidad de atender a mil comensales.
Dormitorios
Callejas multicolores, llenas de encanto y muy bien cuidadas permiten un paseo agradable hasta la hora de comer.
Coches de caballos te pasean por Sintra
Adentrarnos en la Sierra de Sintra significó dirigirnos, si o si, al Palacio y Parque da Pena, los cuales son una escenificación hasta el extremo del ideal romántico.
Construido en el lugar donde fue vista por primera vez la flota de Vasco de Gama en su regreso de las Indias.
En la construcción del Palacio se da una fabulosa mezcla de estilos: renacentista, mudejar, oriental, manuelino...pero sobretodo es hermoso por sus hermosas vistas a la sierra y en día claro .... al mar.
El colorido resultante de la ultima restauración le da una imagen como de cuento de hadas.
Su interior discurre en dos pisos alrededor de un pequeño claustro en el que destacan las dependencias del Rey, las de la Reina y la de su personal más allegado.
La cocina, inmensa con infinidad de pucheros.
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