Low cost, low cost, low cost ... En cuanto a manualidades se refiere pienso siempre en que sean de bajo coste y acabo siempre reciclando.
Buenos días! El post de hoy es muy cortito debido a la sencillez de su trabajo, pero no por ello deja de ser interesante.
Como que es muy facilón lo puede hacer todo el mundo sin problemas, de hecho, mi hija pequeña lo hizo conmigo y estupendamente bien, así que os animo a ello.
Vamos a transformar una caja de fruta, de esas que son de madera de palma en una bandeja para servir .
Yo cogí dos para hacer un juego, una de fresas que es pequeña y otra en la que creo, había melocotones que es más grande y el resultado fue este:
Chulo eh?, pues el juego queda fantástico!
Os presento los materiales que vamos a necesitar:
- Cajas de madera de palma, intentar que no sean altas, quedan mejor si no superan los 5cm de altura, más o menos, del lateral más largo.
- Madera de marquetería para colocar en el fondo de la caja y reforzarla.
- Grapas para fijar la madera.
- Silicona caliente para rejuntar.
- Cola blanca de carpintero.
- Papel de periódico y de cocina o similar.
- Pintura acrílica del color/es que queráis pintarla.
- Pintura selladora.
- Dibujos de papel o tela para decorar la caja.
- Betún de Judea para envejecer (opcional).
- Barniz incoloro con efecto cera.
- Brochas, trapos, disolvente, guantes.
Antes que nada damos un repaso a la caja para ver las condiciones en que está, teniendo en cuenta que la madera de palma es muy frágil y que cajas hay a montón (en cualquier frutería nos darán una) si está rota por algún lado vale la pena sustituirla.
Una vez visto que está estupendamente bien, recortamos una pieza de madera de marquetería de la misma forma que la caja para ponerla en la base de la misma.
Esta pieza la fijaremos con grapas a los listones traveseros que vemos por debajo porque queda más fuerte y también en el perímetro de la caja.
Una vez la hayamos grapado, repasaremos con silicona caliente los huecos que quedan.
Ahora nos toca "forrar" literalmente la caja entera con papel de periódico y cola blanca de carpintero. Mi hija pequeña, que es muy aficionada a estas cositas le llama "mejunje Art Atack", claro! como en la TV, pero es así. Diluimos a partes iguales cola blanca y agua y con esa mezcla vamos empapando el papel y pegándolo en la caja recubriéndola por entero.
Si queréis un "secretillo" utilizar papel de embalar o similar, que es más grueso, en las esquinas y uniones entre maderas. Este tipo de papel cuando se seca es infinitamente más duro y no necesita habitualmente más que una capa.
Una vez la tengamos forrada y seca le daremos una capa selladora que la unifique por completo.
Depende del estilo que queramos dar a la bandeja, el motivo central será uno u otro. En este caso he puesto unos girasoles que encontré por casa pero hay muchísimos motivos que nos pueden quedar genial en revistas, papeles de regalo, propagandas, sellos, motivos vintage ...
En el caso que busquéis por internet alguno y lo imprimáis, tened cuidado con la impresión, sobretodo con las de casa. Habitualmente a la hora de barnizar encima del motivo, el barniz extiende la tinta y desdibuja y difumina el dibujo. Probadlo antes.
Bien, volvemos al dibujo que vamos a colocar en la bandeja ... o dibujos, depende de nosotras.
Lo elegimos y lo presentamos encima para ver qué tal nos queda y entonces decidimos qué color/es vamos a utilizar. Yo os aconsejo colores que se encuentren en el motivo o que le hagan juego, también pueden ser contrastados, pero es únicamente una cuestión de gusto.
Ya tenemos la bandeja pintada y seca! Ahora pegamos, con cola blanca, el motivo elegido en el sitio que nos gusta y que antes ya hemos presentado. Sobretodo aseguraos que está bien pegado y no queda ninguna parte suelta. Si es así, insistimos para que una vez finalizado no se levante nada.
Estupendo!
Las bandejas que preparé las quería con un aire rústico así que me decanté por envejecerlas con un poquito con betún de Judea. Digo un poquito porque hay que extender mucho el betún con un trapo o queda demasiado oscuro y nos lo estropea todo. Debe ser un efecto viejo, nada más, algo así como si estuviera sucio ...
Claro está, que si no quieres envejecerla porque consideras que el estilo que quieres darle no lo pide ... pues no se envejece y listo!
La última capa que vamos a dar es el barniz. Nos hará una capa protectora que permitirá proteger el trabajo y repasarla con una bayeta húmeda en caso que se nos manche con alguna bebida o comida.
Aunque sea una bandeja no es apta para lavavajillas, jajaja!!
El barniz es el acabado que vamos a ver así que debemos escoger uno que nos guste y que sea resistente. Particularmente me decanto por los satinados. Tiene una dureza intermedia entre los brillantes (que son los más duros) y los que no y además le dan un aspecto más natural.
Pero hay muchos acabados en cuestión de barnices. En cualquier caso, os acercáis a vuestro proveedor habitual y que os aconseje.
Espero que os haya gustado y os animéis a iniciar vuestro proceso de reciclaje.
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Un beso grande!
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